jueves, 1 de mayo de 2014

PREPARA LA EUCARISTÍA - 3 DOMINGO DE PASCUA, 4 mayo

PALABRA DE DIOS Lc. 24, 13- 35.

24,13: Aquel mismo día, dos de ellos iban a una aldea llamada Emaús, distante a unas dos leguas de Jerusalén. 24,14: Iban comentando todo lo sucedido.
 
 24,15: Mientras conversaban y discutían, Jesús en persona los alcanzó y se puso a caminar con ellos. 24,16: Pero ellos tenían los ojos incapacitados para reconocerlo.
 
 24,17: Él les preguntó:
   —¿De qué vais conversando por el camino?




   Ellos se detuvieron con semblante afligido,
 24,18: y uno de ellos, llamado Cleofás, le dijo:
   —¿Eres tú el único forastero en Jerusalén, que desconoce lo que ha sucedido allí estos días?
 
 24,19: Jesús preguntó:
   —¿Qué cosa?
   Le contestaron:
   —Lo de Jesús de Nazaret, que era un profeta poderoso en obras y palabras ante Dios y ante todo el pueblo.
 
 24,20: Los sumos sacerdotes y nuestros jefes lo entregaron para que lo condenaran a muerte, y lo crucificaron.
 
 24,21: ¡Nosotros esperábamos que él fuera el liberador de Israel!, pero ya hace tres días que sucedió todo esto.
 
 24,22: Es verdad que unas mujeres de nuestro grupo nos han alarmado; ellas fueron de madrugada al sepulcro, 24,23: y al no encontrar el cadáver, volvieron diciendo que se les habían aparecido unos ángeles asegurándoles que él está vivo.
 
 24,24: También algunos de los nuestros fueron al sepulcro y encontraron todo como habían contado las mujeres; pero a él no lo vieron.
 
 24,25: Jesús les dijo:
   —¡Qué necios y torpes para creer cuanto dijeron los profetas!
 24,26: ¿No tenía que padecer eso el Mesías para entrar en su gloria?
 
 24,27: Y comenzando por Moisés y siguiendo por todos los profetas, les explicó lo que en toda la Escritura se refería a él.
 
 24,28: Se acercaban a la aldea adonde se dirigían, y él fingió seguir adelante.
 
 24,29: Pero ellos le insistieron:
   —Quédate con nosotros, que se hace tarde y el día va de caída.
   Entró para quedarse con ellos;
 24,30: y, mientras estaba con ellos a la mesa, tomó el pan, lo bendijo, lo partió y se lo dio.
  24,31: Entonces se les abrieron los ojos y lo reconocieron. Pero él desapareció de su vista.



 
 24,32: Se dijeron uno al otro:
   —¿No se abrasaba nuestro corazón mientras nos hablaba por el camino y nos explicaba la Escritura?
 
 24,33: Al punto se levantaron, volvieron a Jerusalén y encontraron a los Once con los demás compañeros, 24,34: que decían:
  —Realmente ha resucitado el Señor y se ha aparecido a Simón.
 
 24,35: Ellos por su parte contaron lo que les había sucedido en el camino y cómo lo habían reconocido al partir el pan.

REFLEXIÓN - ¡DEJA QUE LA PALABRA TE LLEGUE!

- La Iglesia experimenta la presencia de Jesús resucitado en su caminar por la historia.Tomamos conciencia:
   a.- Que al corazón humano le cuesta entender el modo de obrar de Dios.
   b.- Del escando-lo que supone proclamar al Crucificado como Mesías Libertador.
   c.- Jesús esta presente en la escucha litúrgica de la Palabra.
   d.- Como el Espíritu abre nuestro corazón. Y nos invita a compartir.

- La fe necesita hacer proceso para que Dios trabaje nuestro corazón, Solo después podre proclamar que el "pan y el vino" son "cuerpo y sangre de Cristo".

- (Hecho real) Una madre me pregunto... ¿Como puedo dar a entender a mi hijo que el pan y el vino son cuerpo y sangre de Cristo? Le dije que ella no podía... pues es el Espíritu quien lo revela. 
Lo que si podemos hacer es: "ir a misa", "descubrir la propia generosidad", "orar", "aceptar ser amado por Dios", "ayudar", "vivir el silencio presente"... Es decir disponerme a la acción de Dios.

PARA ATERRIZAR EN TU VIDA

- ¿Como es tu camino? ¿Con quien lo compartes?
- Los discípulos esperaban un libertador según sus deseos y se encontraron con uno que liberaba con y desde el amor de Dios... Un libertador que acepta amar y desde esa opción asume lo que venga... ¿Es también tu opción? 
- ¿El primer anuncio como te resuena? El crucificado ha resucitado.
- ¿Que lugar ocupa la Palabra de Dios en tu vida?
- ¿En que situaciones el Espíritu te ha abierto los ojos para reconocer la presencia del Resucitado en tu vida?
- Puedes afirmar como los discípulos...¿No se abrasaba nuestro corazón mientras nos hablaba por el camino y nos explicaba la Escritura?



PON EL COMENTARIO O TU PREGUNTA MÁS ABAJO, EN ESTA MISMA PAGINA!!!!

2 comentarios:

  1. Me dispongo al querer de Dios Padre.

    ResponderEliminar
  2. Pido al Espíritu que me ayuda a ver, a ver a Jesús en mi vida , a dejarle entrar y transformar mi corazón . Y mi mirada.

    ResponderEliminar